
Otro vez los vigiladores y un nuevo dia de caos en el centro porteño.
“Ya parecen piqueteros, todos los días quilombo con los vigiladores”, expresó un kiosquero de Avenida de Mayo y 9 de Julio. Es que a la clásica protesta de todos los viernes, ahora se le suman más días de la semana a puro bombo y banderas.
Por sexta semana consecutiva, los vigiladores privados volvieron a salir a las calles para pedir que se regularice la obra social y el sindicato. Ahora fue el turno del Ministerio de Trabajo, apuntado como gran responsable por la no normalización del sindicato que exigen los trabajadores.
Quienes llevan adelante las movilizaciones son trabajadores y delegados autoconvocados de seguridad privada, apoyados por organizaciones gremiales como el Bloque Nacional de Seguridad Privada según pudo leerse en varias banderas frente a la cartera que dirige Kelly Olmos, una especie de frente integrado por gremios de seguridad según le contó a Prensa Argentina uno de los manifestantes. Pese a esto, ellos prefieren identificarse simplemente como trabajadores “hartos de la desidia y abandono del estado”. “Esto va más allá de las banderas gremiales, no estamos reclamando por un gremio en particular, es por los 300.000 trabajadores de seguridad privada”, expresaron.
En este marco, cerca de 200 trabajadores se hicieron presentes en Alem al 600: “No vinimos a cortar nada, -aclararon- es solo la entrega de un escrito a la Ministra Olmos por la situación que enfrenta la actividad, imagínate que si así entregamos los escritos, cuando tengamos que cortar de verdad le copamos el edificio”, chicaneó uno de los manifestantes. La realidad es que lo que fue “solo la entrega de un escrito” termino interrumpiendo totalmente la circulación de uno de los carriles de Alem, circunstancia que motivó al tránsito a desviarse por las vias adyacentes.
El pedido de los trabajadores es que se convoque a nuevas autoridades en el gremio UPSRA “quien no hace elecciones desde el año 2012 y el Ministerio mira para otro lado”, afirmaron los manifestantes, así también reclamaron por la obra social la cual “esta intervenida desde hace dos años y no da prestaciones medicas”, señalaron.
Según pudo averiguar este medio, entre los puntos destacados del escrito también se presentó la denuncia por un encuadramiento ilegal que pretende realizar la cámara empresarial CASEL junto al Sindicato de Empleados de Comercio que lidera Armando Cavalieri, “quienes intentan representar a los trabajadores de seguridad electrónica, siendo que ya están dentro del encuadramiento y con su correspondiente categoría dentro del convenio de UPSRA”, finalizaron.